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viernes, 17 de diciembre de 2010

CEUTA, MELILLA Y MARRUECOS

Recientemente estamos asistiendo a uno más de los numerosos pulsos lanzados por el Reino de Marruecos al estado español.
Tras los sucesos recientes acontecidos en El Aaium (capital del Sáhara Occidental), dónde efectivos del ejército marroquí han atacado un campamento de protesta instalado a las afueras de dicha ciudad y cuyo balance de víctimas se desconoce,  a lo largo de los últimos días hemos vuelto a presenciar nuevos signos de hostilidad del reino alauita hacia las ciudades autónomas españolas de Ceuta y Melilla, volviendo a reivindicar, una vez más, la “marroquinidad” de ambas ciudades españolas. 
Sin embargo, existe un dato que no puede negarse y es la españolidad de Ceuta y Melilla, la cuál queda constatada por la Historia.

Hagamos un pequeño ejercicio de memoria:
Ceuta y Melilla, nunca han estado ligadas al Reino de Marruecos, ambas están bajo soberanía española desde hace varios siglos, mucho antes de que existiera Marruecos. Pero empezaremos por el principio.
Los fenicios, al mismo tiempo que sientan las bases en la Península Ibérica, crean dos ciudades comerciales en los actuales territorios ocupados por Ceuta y Melilla; posteriormente pasan a ser de dominio romano: Melilla en el año 46 d.C. con el nombre de Flavia y Ceuta en el 40 d.C. Septem Frates. Tras el hundimiento del Imperio Romano, fueron invadidas, al igual que Hispania, por los vándalos quedando bajo influencia visigoda. Melilla queda prácticamente destrozada, mientras que Ceuta se convierte en una plaza estratégica fundamental en la zona del Estrecho de Gibraltar.
            A lo largo del medievo ambas ciudades corren diferente suerte: Ceuta por su parte, es reivindicada por los califas peninsulares como parte del territorio ibérico, cayendo bajo dominio del Califato de Córdoba (S. X), de las taifas de Málaga y Murcia (Ss. XI-XIII) y del Reino nazarí de Granada (S. XIV). Las disputas y guerras posteriores por el control del Mediterráneo oriental concluirán con la ocupación de la plaza por los portugueses en 1415.
            Melilla, por su parte, renacerá y se convertirá en una ciudad próspera, formando parte del Califato de Córdoba, sin embargo tras la descomposición de este, Melilla quedó totalmente asolada y serán los castellanos quienes reactiven la ciudad. La conquista por tropas castellanas se produjo en 1497, bajo la empresa de Juan Alonso de Guzmán (tercer duque de Medina Sidonia).  Desde entonces, la Corona española nunca abandonará el territorio melillense.
            Ceuta, por su parte, caerá en manos portuguesas permaneciendo bajo su domunio, incluso  cuando el Reino de Portugal se incorpore a la monarquía hispánica en 1580. Cuando Portugal se separa de la corona española (1640), la ciudad de Ceuta toma una decisión trascendental para su futuro: deciden seguir bajo soberanía española, y de este modo en 1.668 según el Tratado de Paz y Amistad se reconoció por parte de Portugal la españolidad de Ceuta.
            Desde entonces ambas ciudades han estado bajo el hostigamiento de los diferentes poderes que se han ido sucediendo en el norte de África, pero ninguno ha podido hacerse con el dominio de sendas ciudades.
            En 1860 el sultán de Marruecos, por medio del Tratado de Was-Ras reconocerá la españolidad de Ceuta Y Melilla, fijándose las fronteras entre el territorio marroquí y las ciudades españolas. Los primeros años del siglo XX fueron críticos para Melilla tras el estallido de la Guerra de Marruecos y los desastres del Barranco del Lobo (1909) y de Annual (1921), que hicieron peligrar la soberanía española de la ciudad.
            En pleno siglo XX Y Tras la obtención de su independencia (1956) Marruecos ha acentuado la presión sobre los territorios españoles en el norte de África, reivindicándolos como parte integrante de su territorio.
Sin embargo, una vez conocidos los hechos estamos en condiciones de afirmar que Ceuta y Melilla son españolas porque a lo largo de su larga Historia han permanecido vinculadas a nuestro país, y no a Marruecos; no han sido colonias, sino enclaves españoles.

Entonces cabe preguntarse: ¿Qué derechos históricos tiene Marruecos sobre las ciudades de Ceuta y Melilla?