Este 31 de mayo se han cumplido 106 años del atentado
contra Alfonso XIII y María Eugenia de Battemberg en el día de su boda, en
Madrid. El anarquista catalán Mateo Morral (Sabadell, 1880- Torrejón de Ardoz,
1906) lanzó al carruaje, desde la pensión dónde se alojaba, un ramo de flores
que contenía un bomba tipo Orsini. El artefacto cayó cerca de la carroza de los
novios. La confusión fue enorme, las gentes corrian sin rumbo y Mateo Morral
salió de la pensión perdiéndose entre la muchedumbre. Con la ayuda de José
Naskens, director de “El Motín” (periódico muy crítico con la monarquía y la
Iglesia), se trasladó a Torrejón de Ardoz, desde dónde pensaba viajar a
Barcelona.
Los planes de Morral, se truncaron cuando fue reconocido
por varias personas, que alentaron al guarda jurado particular de campo,
Fructuoso Vega. Mateo Morral se entregó pacíficamente, pero cuando era
conducido por el guardia al cuartelillo de Torrejón de Ardoz, Morral le mató de
un tiro y se suicidó a continuación de un tiro en el pecho.
La pareja real salió ilesa, pero como consecuencia de la
explosión perdieron la vida 28 personas y más de cien resultaron heridas. Lo
que iba a ser una jornada festiva, se convirtió para los madrileños en un día
trágico.
Monumento original que conmemoraba el atentado. Fue derribado en la Segunda República.